Aloha!
Aloha!
Desde pequeña buscaba respuestas y maneras de expresarme. Empecé a estudiar Psicología esperando entenderme a mí y al ser humano pero en tercero lo dejé para estudiar Diseño de Moda. Necesitaba expresarme y utilicé la moda como medio.
Empecé a trabajar en moda como directora de producción de Davidelfin y como surgen las mejores cosas, sin buscarlo, años más tarde, surgió la oportunidad de lanzar mi marca propia. Y así hice. Así nació Yiyí Gutz (un nombre complicado nada recomendado por expertos en naming pero así fue y así sigue siendo por ahora).
Sin darme ni cuenta comencé a desfilar en pasarelas nacionales. Especialmente en la Valencia Fashion Week, aunque yo soy de Madrid, donde el primer año que participé gané el premio a la Mejor colección y al siguiente una Mención especial del jurado. Comencé a aparecer en las mejores revistas del sector como Vogue, Elle, Glamour…Hice colaboraciones con grandes marcas como Nike , diseño de vestuario de teatro trabajando con grandes figuras como Juan Diego Botto, José Coronado, Marta Etura o Emilio Gutiérrez Caba.
En principio y visto así, todo muy guay. Pero yo no lo sentía así…Todas mis creencias limitantes me acompañaban día tras día. Mi perfeccionismo extremo no me permitía disfrutar de nada de lo que hacía. Tampoco disfrutaba de las grandes fiestas a las que me invitaban ni de las entrevistas que me hacían. Yo, al más puro estilo Margiela, decía que lo importante no era yo sino mi trabajo. Miedo a la exposición, creencias limitantes con el dinero, comparación con otras compañeras, sintiéndome yo peor, of course! y envidia por el éxito de otros, junto a la crítica, claro. Perfeccionismo extremo, autoexigencia y control.
Quizá algo de esto te suene. Ahí lo dejo…
Dejé la ropa y comencé un nuevo proyecto Yiyí Gutz On Wood, joyitas hechas con ramitas caídas de los árboles. Si, vendía palos y vendí mogollón. Creé un concepto muy guay. Conseguí un montón de puntos de venta y volví a aparecer en las revistas más importantes de moda. De nuevo todo iba bien pero al igual que me pasó con las colecciones de moda apareció mi gran amigo miedo al éxito, que veía de la mano de otra gran colega, la falta de merecimiento.
En esa época impartía clases de Fashion marketing, Fashion business, proyectos, branding y diseño gráfico en distintas escuelas de moda de Madrid. Tutoricé distintos proyectos de máster y veía cómo podía ayudar a mis alumnos con mi experiencia. Eso me hacía muy feliz. Empecé a colaborar con una importante empresa de moda como formadora y de nuevo me hacía muy feliz el poder ayudar a gente a que fueran mejores en su trabajo. Ahí apareció uno de los grandes valores que me acompañan hasta ahora.
En esa época comencé a practicar yoga, en principio para ser flexible y estar buena que ya me acercaba a los 40…Y BOOOOOOOMMMMMMMM!!!!!!! Todo cambió.
Empecé a mirar hacia dentro encontré un montón de respuestas que había buscando fuera durante años. Otras llegaron más tarde con ayuda de terapia. Dejé la moda y me formé en enseñanza de yoga y meditación. La profundización en estos campos me abrió las puertas a otras herramientas de autoconocimiento y desarrollo personal como el coaching, el eneagrama o la PNL. Ay si hubiera tenido antes todas estas herramientas cuando emprendí en Moda!…
Ahora tengo un montón de herramientas con las que gestionar todas esas creencias limitantes. La impostora viene a visitarme de vez en cuando, pero le digo un par de cositas y la pongo a raya. Y el miedo me acompaña de la mano a todas partes, pero ahora le tengo calladito y no me paraliza, aunque ahí está siempre.
Ay si esto me hubiera llegado antes!… pero no, me llegó cuando me tenía que llegar. Justo cuando lo necesitaba. Tenía que pasar por ahí para conocerlo. Ahora puedo decir "yo también estuve ahí y ahora estoy aquí". Hablo con conocimiento de causa de un lado y del otro. Sé de lo que hablo, pero ya desde otro lugar.
También me he dado cuenta de que eso no sólo me pasaba a mi, seguro que muchas cosas te han resonado, en otros contextos y por otro motivos pero todos somos humanos y nos pasan cosas de humanos. Este ha sido mi camino, mi historia, la tuya será otra.
Los creativos estamos hechos de otra pasta y muchas veces nos sentimos perdidos, pero confía, vas por buen camino siempre que te escuches alto. No te quedes con las ganas de vivir de tu talento, de aquello que te hace tan especial.
Ve hacia lo que realmente quieres, te lo estás gritando por dentro. Yo te acompaño y te ayudo a trazar un plan.
PERO ESTO NO VA DE MÍ SINO DE TI.
LA VIDA SON ETAPAS, AHORA TE TOCA CREER EN TI Y DISFRUTAR DE TU CREATIVIDAD.
Esto es lo que puedo hacer por ti:
Puedo agitar tu mente para que así elimines creencias limitantes, encontrar tus valores, tus fortalezas y cumplir tus objetivos.
Puedo destripar contigo todo tu negocio y planificar estrategias que te permitan tener un negocio real y rentable y no un hobby caro.
Y también te puedo acompañar en el fantástico camino para encontrar tu voz creativa y diferenciación.
Eso sí, todo esto desde el autoconocimiento. Gestionado esas creencias limitantes que te acompañarán en el camino, que te bloquean y te alejan de la vida que quieres y mereces. Apostando por el autocuidado y el bienestar, alejando el estrés de tu emprendimiento porque tienes un viaje emocionante por delante.